martes, 21 de diciembre de 2010

Reflexion del arte de amar- Erich Fromn

Muchas veces quise saber que significaba amar, quise saber si amaba de forma correcta o incorrecta, cual era la forma correcta si es que la había. Quería saber como era posible que de pronto una persona común y corriente pudiera convertirse finalmente en alguien que amaríamos mas tarde. Quería poder diferencia amor de pura obsesión.
Con el libro el arte de amar pude descubrir que hay distintos tipo de amor, desde el amor de fraternal, materno, erótico, amor a si mismo, hasta el amor a Dios. Muchas formas de amor y también muchas formas de amar. Podemos ver que el tipo de amor esta arraigado fácilmente a nuestra infancia.
Vemos de que manera reflejamos nuestro amor, haciéndonos referencia a nuestros padres y a como estos nos han educado. Aquellas personas que solo tienen un padre podrán tomar un aspecto, rudo, amenazador, queriendo siempre llevar el mando; mientras que si fueron criados por la madre podremos notar cierta dulzura, sensibilidad en la persona.
A lo largo de nuestra vida vamos a reflejar este tipo de amor que tenían nuestros padres en nuestros distintos tipos relaciones. Podemos encontrar que en una de ellas busquemos el tipo de persona que solía ser nuestra madre, y después podemos descubrir que nos sucede lo mismo buscando inconcientemente una persona que nos permita ver reflejado el tipo de persona y el amor que solía tener nuestro padre. Ambos tipos de amor son una forma de aprendizaje que vamos a vivir si o si para comprender finalmente el verdadero amor. Una vez que nos hallamos podido despejar de estas dos figuras podremos finalmente comprender lo que es el significado del amor. Y hasta que esto no suceda no lo comprenderemos del todo. Pudiendo así conocernos a nosotros mismos, pudiendo ser simplemente nosotros en nuestras relaciones amorosas. Amándonos a nosotros mismos tanto como a la otra persona. Diciendo así que si no nos amamos a nosotros mismos o a los seres humanos y a la vida podrá desearse apegarse a una persona, pero no llegar a amarla de verdad. Por lo tanto paro poder conseguir una plenitud en nuestra vida relacionada con el amor, primero debemos amarnos a nosotros mismos, aceptarnos tal cual somos, amar a la vida y a lo que nos rodea y finalmente ahí podremos amar a otras personas verdaderamente.

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